CHALETS DE CHUEGA GOITIA EN COVAS

 

Imágenes de TheCliffsofLoiba/ Covas Seabreeze Cottage

REDACCIÓN LANDRO

ALS

CHALETS DE CHUECA GOITIA

De un estilo regionalista y con material de la zona se construyeron estas residencias de verano en 1945. Estaban enfrente a un referente turístico del momento como era el antiguo hotel Villa Dolores, inaugurado en 1930, es más era la misma parcela y fue vendido con la condición de edificar sin restarle vistas a dicho complejo. Podríamos decir que casi integrados dentro del arenal de Grallal, como las viviendas de la conocida Ciudad Veraniega donde encontramos también Villa Pulgas de 1950. 

Estas viviendas guardan similitud a la sociales de Pénjamo o  Chao y Atalaya en Celeiro, también levantadas en posguerra. Guardan un estilo que los define con el uso de losa, piedra sin trabajar en esquinas y ventanas, ladrillo visto en detalles, encaladas de blanco y típicas ventanas verdes. Son 11 Chalets y sus correspondiente 11 garajes. Están divididos en dos bloques, miden 167,170,189m2 y 236m2 el más grande, este se ubica en un extremo derecho mirando hacia el mar. Se asientan sobre una parcela de 4925m2.

Primero se construyen los 6 chalets originales que son los de la derecha mirando al mar para las familias  Canosa, Osorio, Alonso, Valcarce, Gil y Páramo. Las edificaciones gemelas de enfrete las hará Canosa para sus 5 hijos. Pertenecieron a las mismas familias hasta que entorno a los años 80, se fueron alquilando o deshaciendo de las propiedades para quedar en manos de diferentes particulares.

El principal promotor será el Ministro del Tribunal de Cuentas y editor del Heraldo de Viveiro, Don Ramón Canosa Suárez. Por entonces tenía también la propiedad de montaña de Gilán con cerca de 100 hectáreas, una de las más grandes del municipo, el Kehlsteinhaus del Landro, nido del Águila viveirense. Autor de "Historia menuda de un pueblo Gallego" (1953), "Vivero otra vez" (1969), "Nueva estampa de un pueblo Gallego" (1967).

El arquitecto que las realizó contaba 34 años, uno de los más afamados a nivel nacional, era Fernando Chueca Goitia (1911-2004). Hijo del ingeniero Ángel Chueca Sainz, conocido por realizar estructuras para el gallego Antonio Palacios, como la del Palacio de Telégrafos, hoy Ayuntamiento de Madrid; también uno de los fundadores del Real Automóvil Club de España (RACE). Chueca fue un académico e historiador. Catedrático, miembro de la Real Academia de San Fernando y de la Real Academia de Historia, Presidente del Instituto de España o Senador en la transición.  Se le conoce por obras de restauración de monumentos y pueblos como: Casa de las Siete Chimeneas (Madrid), Monasterio de San Millán de la Cogolla, Palacio de Galiana (Toledo), Palacio de Carlos V (Granada), Catedral de Valencia, Catedral de Tarazona, Casa consistorial de Tarazona (1968-1973), Monasterio de Santa María la Real (Nájera), Oratorio del Caballero de Gracia (Madrid), Panteón de Goya en la ermita de San Antonio de la Florida (Madrid) Iglesia de San Caprasio (Huesca), Palacio Goyeneche, sede de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid), Iglesia de los Santos Justo y Pastor (Toledo), Casa de los Lujanes (Madrid), Catedral de Palencia, Proyecto del conjunto escultórico del Monumento al Cid Campeador y el Ciclo cidiano (Burgos, 1947-1955), Ampliación del Museo del Prado (Madrid, 1953-1958), Remodelación del Barrio e Iglesia de San Miguel en Cuenca (1959), Pueblo español de Palma de Mallorca (Palma de Mallorca, 1965-1967), Ampliación del Edificio Banco de Santander (Santander, 1974-1975),Sepulcro del Gran Duque de Alba en el convento de San Esteban de Salamanca (1985). Por todo este inmenso trabajo de revitalización del Patrimonio español, recibió en Premio Nacional de Historia en 2002.

Además para Vivero proyectó la edificación de un consistorio, donde se emplaza el actual, siendo alcalde Eusebio Valdés Pastor (1943-1950). Su hechura era similar al de Ferrol de Nemesio López o Vicente García Lastra, Brunete o a la famosa Puerta del Sol, todos de estilo al Escorial. En su momento el modelo, neoherreriano, de Juan de Herrera, era la pauta a seguir para la "reconstrucción nacional" por el régimen, recordaba lo imperial. El patrón, era de formas puras, simétricas y limpias, en este caso con los bajos con arcadas, torreones laterales con tejado a dos aguas, reloj central, balconada en planta noble, etc... Sin duda una obra monumental que de haberse realizado hubiera cambiado la fachada de la Plaza Mayor.

Un discípulo suyo Rafael Manzano Martos también realizó una rehabilitación en Viveiro, el Convento de San Francisco; además de Sobrado dos Monxes, la Catedral de Sevilla, el Palacio de las Dueñas. Por ellas y otras recibió en la Universidad de Notre D no noame de Indiana el Premio Driehaus.

La arquitectura de rehabilitación historicista no solo vela por la preservación cultural. También hace un ejercicio de ecología contra un crecimiento urbano desmesurado, usando material autóctono y sostenible. Además de reutilizar o funcionalizar lo ya existente uniendo el pasado con el futuro. 

Esta casas son un caso local de patrimonio arquitectónico civil, residencias ligadas al poder del momento. Como lo fueron en su día las eclécticas indianas como el Fondón de Magazos en 1927 para los Pernas, Villa María en 1910 para los Rodríguez Sintra, la Casa de la Mina para el alemán Friedrich Wilhelm Cloos, la renacentista Casa de los Leones del XVII para los Ponte, el Pazo de Grallal del XVI para los Dutton...